XIX Escuela de Verano UGT Extremadura
Fecha: 20 Oct 2021
XIX Escuela de Verano de UGT Extremadura
El día 19 de octubre de 2021, se celebró en la sede de UGT Extremadura de Mérida, la “XIX Escuela de Verano de UGT Extremadura”, con la temática “Retos Sindicales”.
La inauguración ha sido por parte del alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, la secretaria general de UGT Extremadura, Patro Sánchez, y el presidente de la Junta de Extremadura Guillermo Fernández Vara. Posteriormente cerró el acto, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez.
En el acto, se han analizado retos sindicales como la subida del Salario Mínimo Interprofesional, la derogación de la reforma laboral y la Ley Mordaza, luchar por unas pensiones dignas o la propiedad de los datos.
La secretaria general de UGT Extremadura, Patro Sánchez, en sus declaraciones a los medios, ha indicado que, una vez casi pasada la pandemia, la sociedad se enfrenta a muchos retos, momento en el que ha recordado que el sindicato ha estado desde el "minuto cero" ayudando y colaborando con la administración autonómica, además de estar al lado de los trabajadores.
Por ello, y ahora que llega el momento y el proceso de reconstrucción, ha apuntado, UGT quiere ser también parte de ello y, a través del diálogo y de la concertación social, estará pendiente para que Extremadura pueda salir de la mejor manera de la situación en la que está.
La secretaria general ha situado entre los retos sindicales más destacados derogar la reforma laboral y la Ley Mordaza, pelear por unas pensiones dignas, así como atender a los más desfavorecidos, ya que "nadie se puede quedar atrás".
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha reclamado durante la XIX Escuela de Verano de UGT Extremadura, el aumento generalizado de los salarios, más ayudas para el campo y un acuerdo que asegure la viabilidad del sistema público de pensiones.
Ha abordado los desafíos imprescindibles que necesita nuestro país a corto plazo. “La reforma laboral, antes de que acabe este año, tiene que estar derogada, totalmente o parcialmente y cambiarla por otras cuestiones, como el tema de la contratación o el despido. Desde los sindicatos tenemos que ser optimistas. Se van a dar unas condiciones que nos van a permitir cambiar de manera importante la legislación de nuestro país”.
Para Pepe Álvarez, “la patronal de nuestro país no cumple. Los empresarios del sector agrícola deberían sonrojarse por no aplicar, un año después el IV AENC, los 1.000 euros de salario mínimo convenio que firmaron. En Extremadura no solo no se cumple, sino que se pretende no subir el SMI, incumpliendo la legislación de nuestro país. No se puede subir la jornada para compensar esta subida del SMI. El convenio se tiene que respetar”.
Ha destacado también que Europa ha sido fundamental para salir de la crisis, ha considerado que “hay muchas lecciones que tenemos que aprender de la pandemia que estamos terminando de pasar. Una de ellas es la importancia de estar en la UE durante la crisis. Si no hubiéramos estado, hubiéramos sido incapaces de acudir a buscar recursos para sobrellevar esta crisis. La UE ha sido la gran culpable de que la vacuna se haya administrado con los criterios marcados por los sanitarios y no por los bolsillos de cada uno”.
Mucha importancia al sector público, “que hay que fortalecer de manera urgente. El peso que ha tenido el servicio de salud durante esta crisis ha sido fundamental. Y eso con los recortes que ha sufrido durante los últimos años. También ha sucedido con la administración pública, que está mermada y hace aguas”.
Hay que aprovechar los PGE para solucionar los problemas de las personas, ha recordado que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 son fundamentales para poder salir de esta crisis y encaminar la senda de la recuperación con las mejores garantías.
Las empresas se enriquecen con nuestros datos, ha sido un tema de relevancia que el sindicato ha tratado durante la escuela de verano será la protección y propiedad de los datos. El secretario general ha dicho que, “Nuestros datos se están vendiendo, se intercambian entre empresas y se generan recursos importantes para ellas, cuando esos datos son nuestros. Hay que ir hacia una protección de datos para preservar nuestra privacidad y para que no se comercialice con ellos. Hablamos de una cantidad de 30.000 euros al año por los datos de cada persona. Es un debate que hay que abordar a nivel mundial”.