UGT aboga por impulsar la formación para el comercio para avanzar en su modernización, productividad y competitividad
Tras estudiar las necesidades formativa en el sector, el sindicato afirma que hay que garantizar el derecho a la formación mitigando la sobrecarga laboral y la falta de conciliación
Fecha: 27 Dic 2024
UGT Extremadura considera que sindicatos, empresas y administración tienen que impulsar la formación para el empleo en el sector del comercio, ya que es imprescindible para avanzar en la modernización, la productividad y la competitividad de un sector “relevante” en la economía extremeña, que se enfrenta a muchos retos por los nuevos hábitos de consumo, por lo que debería volver a formar parte de los sectores estratégicos establecidos anualmente en la oferta formativa para ocupados.
Es una de las conclusiones del ‘Estudio de necesidades formativas del sector del comercio en Extremadura’, realizado por el sindicato, que refleja los obstáculos que encuentran las trabajadoras y trabajadores para formarse, como son la sobrecarga laboral y la falta de conciliación efectiva, problemas que “hay que mitigar para garantizar el derecho a la formación de las personas trabajadoras”, ha resaltado la secretaria de Organización y Formación, María José Judith Pastor Martín.
Así, el estudio, basado en una encuesta realizada a 1.040 trabajadoras y trabajadores del sector, pone de manifiesto la incompatibilidad existente entre los horarios de los cursos con otras tareas o con responsabilidades familiares, factor que tiene especial trascendencia en el caso de las mujeres trabajadoras. Por ello, insiste Pastor, “es necesario poner en marcha medidas efectivas para conciliar la vida laboral y familiar también en el ámbito de la formación para el empleo”.
Además, los datos reflejan una falta de concienciación en algunas empresas sobre la importancia de la formación como elemento fundamental para ganar en competitividad, por lo que es necesario fomentar un cambio de mentalidad general para entender la formación como una inversión y no como un coste impuesto.
Formación en el sector
Según los datos de la encuesta, la formación fue esporádica en el último año, ya que un 38% de las personas encuestadas no han recibido ningún curso de formación y los que han recibido solo un curso, oscilan entre el 22% del comercio al por menor y el 35,5% del mayorista.
Los principales obstáculos que encuentran los trabajadores para asistir a las acciones formativas son la sobrecarga laboral, que afecta a entre un 18,5% y un 27,4%; las dificultades para conciliar y los horarios, a los que apunta el 20% de los trabajadores del comercio mayorista y el 16% del comercio minorista. Un 34% de los encuestados afirma no tener dificultad.
Entre los que no han recibido formación en el último año, el 28-29% dice que la formación ofertada no se ajusta a sus necesidades, aunque seis de cada diez trabajadores del comercio minorista otorgan a los cursos una valoración superior a 7.
Las personas encuestadas consideran que la formación mejoraría si los cursos tuviesen una mayor especialización y estuviesen más adaptados a la realidad del sector. Uno de cada cuatro encuestados demanda un mayor contenido práctico. Un 64% no conoce la oferta formativa de la Junta de Extremadura.
El 53,3% de los encuestados consideran que tiene carencias formativas para el desempeño de su trabajo, entre las que destacan la digitalización, los idiomas, las redes sociales y la atención al cliente. De forma añadida demandan formación en gestión de equipos y prevención de riesgos laborales.
El 30% de los que han recibido formación consideran que esta les ha permitido adquirir conocimientos para su desarrollo profesional, entre un 25 y un 29% dicen que les ha permitido promocionar en su trabajo y un 27% considera que impulsa su desarrollo personal. Solo el 23-24% piensa que la formación le facilita el acceso al empleo.
Relevancia del comercio
En cuanto a la importancia del sector del comercio dentro de la economía extremeña, cabe destacar que en el 2022 representaba el 12,5% del Valor Agregado Bruto (VAB) extremeño.
El 1 de enero de este año existían 16.814 empresas activas, lo que representa un 26,4% del total de las empresas de la región, porcentaje sensiblemente superior al 19,5% que supone a nivel nacional, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) En el último año se registra una bajada del 1,68%.
El 97,4% de las empresas del sector del comercio son microempresas.
En el 2023, el sector daba empleo a 61.000 personas de media, el 14,7% del total regional, un dato de empleo que se redujo desde 2020 en 4.800 ocupados principalmente en el sector mayorista, y la afiliación de los asalariados disminuyó en 2.000 afiliados, mientras que se incrementó el número de autónomos en 490.
El comercio es un sector con una alta tasa de temporalidad, uno de cada cinco contratos no llega a una semana de duración de media en 2023. La tasa de temporalidad es del 35,24% elevándose al 42,53% en el comercio minorista.
El desempleo en el comercio es de apenas el 3,9% del total de desempleados de la región. El 46% de dicho paro es de larga duración y afecta principalmente a las mujeres.
Del total de contratos suscritos en Extremadura en el 2023 (24.787), el 6,1% son del sector del comercio. En el comercio minorista son mayoritarios los contratos a tiempo parcial, de los que el 75% son para mujeres.
El comercio minorista es preponderante en Extremadura, ya que acoge al 63,1% del total de empresas y genera 42.700 empleos, frente a los 13.800 del comercio al por mayor.
El 85% de las empresas de comercio minorista y el 77,5% de las mayoristas se concentran en poblaciones mayores de 5.000 habitantes. Sus empleados son varones en un 63% en el comercio minorista y en un 60% en el mayorista. El 38% de los trabajadores tiene más de 45 años, por lo que los trabajadores del sector presentan una media de edad elevada, aunque menos en el comercio minorista.
En cuanto al nivel de estudios es bajo, uno de cada cuatro trabajadores tiene como mucho el graduado escolar, uno de cada cinco la ESO y solo un 13% tiene educación superior.
La categoría profesional más frecuente es la de dependiente/a en el minorista, con un 49%, mientras que, en el mayorista, los operarios y mozos de departamentos suponen cerca del 23% del total.