La mejora de la calidad del empleo y la reducción de la jornada laboral son dos de los retos por los que, a través del diálogo social, UGT Extremadura trabajará durante el 2025 con el fin de consolidar y ampliar los derechos sociales y laborales conseguidos durante los últimos años.
Así lo ha anunciado la secretaria general del sindicato en la región, Patro Sánchez, tras valorar un fructífero 2024, en el que se han firmado ocho planes y programas de empleo, economía, trabajo autónomo y prevención de riesgos laborales, en los que “hemos hecho aportaciones de trascendencia”.
“Nuestro principal reto es la mejora de la calidad del empleo”, ha dicho Sánchez, que ha recordado que “Extremadura tiene el empleo de peor calidad del Estado”, con una tasa de temporalidad que, pese a haber mejorado gracias a la reforma laboral, sigue siendo la segunda más elevada, un 23% frente al 16% de la tasa nacional; una tasa de ocupados con jornadas más largas que es la segunda más alta, y con los salarios más bajos del país.
Otro hito importante que tendrá un impacto positivo sobre la economía y la conciliación, entre otros, será la jornada laboral de 37,5 horas semanales, una jornada que en Extremadura está actualmente en 38,4 horas semanales. 
Sobre la reducción de la jornada laboral acordada por el Gobierno y los sindicatos, Patro Sánchez ha lamentado “la actitud alarmista y obstruccionista de la patronal”.
Reducir el paro de larga duración, combatir el edadismo y acabar con el empleo parcial involuntario, son otros de los propósitos para este año. En Extremadura, el 40% de las personas paradas llevan más de un año buscando empleo, el 47,5% son mayores de 50 años, lo que apunta a que existe discriminación por edad en las contrataciones, y el 64,3% de los parados son mujeres.
UGT Extremadura considera también que hay que reformar el coste del despido improcedente fijando un coste de despido disuasorio y reparador, lo cual es “esencial -ha dicho- para mejorar el funcionamiento del mercado laboral y reforzar los derechos de las personas trabajadoras”.
Otro reto es seguir aumentando los salarios. En una región como Extremadura, con unos de los salarios más bajos del país, es fundamental la subida del SMI, un incremento que beneficiará a 80.000 trabajadores y trabajadoras, y también la subida de los salarios mediante la negociación colectiva. Es necesario para avanzar en la convergencia con los salarios del resto de España y para recuperar los cinco puntos de poder adquisitivo que los extremeños han perdido en los últimos cuatro años
Por lo que se refiere a la siniestralidad laboral, UGT Extremadura seguirá trabajando para que no se produzcan accidentes mortales en el trabajo. Este debe ser el reto del IX Plan de Actuación para la Prevención de Riesgos Laborales suscrito en el 2024, un año en el que los fallecidos en el ejercicio de su profesión ascendieron a 22.
“La industrialización sigue siendo la asignatura pendiente de Extremadura”, ha afirmado Patro Sánchez, que reivindica una política pública decidida para apoyar grandes industrias que favorezcan un salto en la riqueza regional.
Otra de las reivindicaciones para este año será facilitar el acceso a la vivienda a un precio asequible, algo que “no se consigue eliminando el impuesto a los grandes tenedores de viviendas vacías”, ha criticado Sánchez.
Por último, la secretaria general ha dicho que para seguir impulsando el dinamismo de la economía extremeña es esencial disponer de unos presupuestos, ejecutarlos y priorizar la inversión productiva y las políticas de bienestar social.